sábado, 15 de agosto de 2009

H.P. Lovecraft, Ciclo de Randolph Carter

Es un pequeño compendio de historias independientes pero con coherencia entre sí. Randolph Carter no es exactamente un alter ego de Lovecraft, pero desde luego sí que es un personaje con muchas similitudes con el autor. Además el hecho de que Lovecraft fuera muy reacio a repetir personajes un sus relatos (casi todos suelen acabar muertos, locos, o tan espantados que no vuelven a abrir la boca) es bastante significativo a la hora de juzgar la importancia que tenía para él este personaje.

Pero aparte del protagonista, esta selección de relatos comparte también la exploración del mundo de los sueños, ese otro lado que visitaba Lovecraft para inspirar sus historias, presentado como un mundo igual de real o más que el nuestro.
Independientemente de la orientación de terror y misterio que es el sello de este autor, los relatos sobre Randolph Carter profundizan en un tema que puede considerarse filosófico: El mundo tangible es una ilusión, mientras que el mundo intangible es la pura esencia de las cosas. En el tercer relato que expongo más adelante se ahonda en este tema de una forma casi científica, lo que lo hace todavía más aterrador.

Para quien tenga interés en este grupo de historias, que se pueden leer por separado o en conjunto, os dejo a continuación un muy pequeño resumen de cada una de ellas.

La declaración de Randolph Carter ( The statement of R.C.) : Podíamos decir que es el debut del personaje. Una historia muy en la linea de los Mitos de Cuthulu, en la que nos encontramos con lo extraño sin llegar a adentrarnos en él.

La llave de plata ( The silver key) : Si hay que elegir un relato para leer de forma independiente es éste. Trata sobre la búsqueda los sueños de la infancia, ese paraíso perdido en que vivimos antes de que nuestra mente racional se imponga según maduramos y el mundo comience a ser un lugar cada vez menos interesante.

A través de las puertas de la llave de plata (Through the gates of the silver key) : Es la continuación directa del relato anterior. Aunque no es exclusivo de Lovecraft, pues colaboró junto con E. Hoffman Price, mantiene el espíritu lovecraftino al dedillo. Nos presenta el mundo material como algo nimio, una mera proyección desde cierta perspectiva de otro mundo intangible pero infinito. El tiempo, el espacio, la cuarta dimensión, la quinta, la sexta... no son más que distintas intersecciones en el conjunto de infinitas dimensiones. Lo explica de forma tan correcta y científica que uno se pregunta si es cierto todo lo que cuenta, lo que hace este relato todavía más aterrador.

La búsqueda onírica de la desconocida Kadath (The dream-quest of unknown Kadath) : También traducida como "En busca de la ciudad del sol poniente", es una auténtica joya de la obra de Lovecraft, aunque una de las más pesadas de leer. Completamente descriptiva, 150 páginas sin diálogos que narran la búsqueda de Randolph Carter a través del mundo onírico de la hermosa ciudad que ha visto en sus sueños en el mundo vigil. Una epopeya a través de los bordes de la imaginación donde se encuentran los sueños más fantásticos y las más terribles pesadillas. Hay que tener ganas para leerlo, pero una vez terminado descubres que has tomado la búsqueda de Kadath como la tuya propia.

Testimonio de Thomas Owen : Un pequeño punto final en forma de colaboración que sirve para devolvernos de nuevo al mundo material, aunque dejando siempre abierta la puerta de atrás al mundo de los sueños.

Lovecraft era un personaje muy peculiar. Era un racionalista ferviente que apoyaba sus creencias sólidamente en la razón. Esto no significa que Lovecraft tuviese la mente cerrada y cuadriculada, sino todo lo contrario. Generalmente una persona fundamentalmente racionalista se convierte en un incrédulo corto de miras, sin embargo Lovecraft tomaba la imaginación, los sueños y lo irracional como el éter en el que flota la propia razón humana. Nuestro mundo vigil funciona con un determinismo y una causalidad implacable, sin embargo no es más que una isla en un mar primigenio, el orden surgido del caos, una negrura acromática llena de color irradiada de luz blanca donde reinan los Otros dioses cuyo mensajero es el caos reptante Nyarlathotep. La imaginación humana y la capacidad de soñar es una puerta que nos permite adentrarnos y nadar en ese mar ancestral, aunque la experiencia no siempre resulte del todo agradable.